Si quiere saber cual es en realidad el corazón del conflicto palestino israelí, no consulte con políticos o diplomáticos. Busque la causa en los niños palestinos.
Diferente al resto del mundo, ellos estuvieron prestando una cercana atención a cierto tipo de enseñanza que sus líderes y educadores han estado impartiendo. Y están listos para practicarla.
Por ejemplo, los niños entrevistados en la televisión palestina expresan, sin reservas, que Israel no tiene derecho de existir, y que el objetivo al cual ellos están dispuestos, es a sacrificar sus vidas para la destrucción de Israel.
“Ellos (los judíos) llegaron para tomar Palestina, en ciudades como Tel Aviv, Jaffo, Haifa, Akko. Todas estas ciudades pertenecen a Palestina” explicó un joven en una televisación del 25 de diciembre, haciendo eco de años de adoctrinamiento normal de la Autoridad Palestina.
Convencido de que Israel no tiene derecho a existir, enfatizó: “Tenemos esperanza de que los países árabes y los países extranjeros apoyarán a los palestinos y expulsarán a los israelíes. Debemos expulsar a todos los israelíes de Palestina. Ya que Israel no existe ni hay nada llamado Israel en el mundo. Los israelíes llegaron de Holanda, Estados Unidos, Irán”.
Se pudo ver a los niños prometiendo mantener la lucha, generación tras generación, hasta que liberen a Palestina.
Afirman que no temen a la muerte durante la lucha ya que es shahada, la muerte por Alá.
“Israel como un ocupante extranjero”
Nada de esto es sorprendente para quien ha prestado atención a lo que hace el sistema educacional de la Autoridad Palestina. Israel es borrado de los mapas palestinos, los textos de escuela y los historiadores niegan el derecho a existir de Israel, y los educadores -en todos los niveles- enseñan que Israel es un implante colonial extranjero.
A pesar de los dichos palestinos en contrario, sus libros de estudio continúan deslegitimando a Israel y lo pintan como un ocupante extranjero: “Palestina enfrentó la ocupación británica luego de la Primera Guerra Mundial en 1917, y la ocupación israelí en 1948”.
A los niños se les enseña que todas las partes de Israel son Palestina. Como ejemplo: “Entre las famosas piedras del sur de Palestina están las piedras de Bersheva y el Néguev”.
Acerca de las fuentes de agua palestina, los niños aprenden que: “Lo más importante es el Mar de Galilea”.
Estos mensajes de deslegitimización han sido afirmados por el Primer Ministro Abu Ala. El rechaza la idea de Israel como un Estado judío.
“El Presidente Bush dijo que Israel es un estado judío, lo que representa para nosotros un tema de preocupación. Esto no debería haber sido dicho”, le dijo a Al Nahar y a Al Jaiat Al Jadida el 15 de enero de 2003.
La T.V.
Los historiadores afiliados con la Autoridad Palestina aparecen en la televisión educativa para reforzar este mensaje. El 28 de diciembre el doctor Isam Sisalem reiteró lo que dijo en varias transmisiones. Los judíos “no tienen historia o conexión con esta tierra”.
En el mismo programa otro historiador hizo resurgir “Los Protocolos de los Sabios de Sión”, la infame falsificación antisemita, citándolo como uno de los fundamentos del Primer Congreso Judío Sionista de 1897.
“El movimiento sionista comenzó en el Congreso de Basilea planeando la explotación del poder de la lucha, y la lucha de Europa sobre el Medio Oriente”, dijo el doctor Riad Al Astal, un historiador de la Universidad Al Azhar de Gaza.
Consiguientemente, cuando vemos a los niños en la televisión palestina -quienes dicen que quieren destruir Israel para liberar Tel Aviv, Jaffo, Haifa o Akko, y expulsar a los judíos- vemos a los niños que están reflejando los sentimientos inculcados y reforzados a través de la sociedad palestina.
Así es que años de adoctrinamiento anti israelí han sido alarmantemente efectivos para enseñarles que los judíos no tienen relación con Israel, que no tienen derecho a existir y que el objetivo supremo de la próxima generación “aún a costo de sus vidas“ debe ser eliminar a Israel.
La esencia del conflicto
La esencia del conflicto es el verdadero derecho de Israel para existir (no el tema de las fronteras o de los refugiados). Las negociaciones de paz que no traten el sistema de adoctrinamiento palestino, serán acuerdos a corto plazo previstos para fracasar.
Los niños palestinos ya han demostrado esto. Quizá el resto de nosotros necesitamos quedarnos luego de la escuela.