Víctor Stinfale aseveró frente a los jueces del Tribunal Oral Federal Número 3 que los responsables de los delitos que se cometieron en la causa tienen «nombre y apellido» y mencionó al gobierno del ex Presidente Menem, a los instructores de la causa y a la dirigencia judía. Pidió que recordaran que durante el menemismo «el poder político y el judicial no funcionaban como órganos independientes».
«Creían que se podía tomar el pelo a la gente» dijo y explicó que la imputación pedida en 1995 contra su cliente como partícipe del atentado es «un pasquín hipócrita y mentiroso» criticando también, así, la investigación realizada por el juez -apartado de la causa- Juan José Galeano.
Stinfale habló de un sólido bloque conformado por el gobierno menemista, la justicia y el establishment comunitario de la “colectividad judía” refiriéndose, claramente, al ex presidente de la DAIA, Rubén Beraja.
“Beraja era la comunidad judía, afirmó secamente Stinfale, era el banquero de la comunidad y la comunidad seguía a su banquero”.
Luego, dirigiéndose a los familiares de las víctimas afirmó que “los líderes de la comunidad les mintieron”.
La abogada Andrea Novelo, a su turno, afirmó que la SIDE «no realizó una buena tarea de prevención» del atentado y que los espías que declararon en «en el juicio no dijeron todo lo que sabían… hubo un desvio (de la causa) desde el inicio». Respecto al juez Galeano, insistió en que debe responder por el delito de «encubrimiento doloso del atentado».
La defensa de Telleldín durará toda la semana y ya anticiparon que solicitarán la absolución de su cliente.
