Se lanzó la iniciativa para los colonos después de las fuertes olas de protestas de la semana pasada que provocaron temores acerca de duras confrontaciones durante el retiro programado para mediados de agosto.
El documento hace un llamado a la no violencia y a que los colonos entreguen sus armas voluntariamente para evitar agresiones verbales a las fuerzas de seguridad.
Moshé Katzav, el Presidente israelí, advirtió que los extremistas que participan de las protestas podrían recurrir a medidas drásticas, incluyendo el asesinato. «Definitivamente es probable que intenten llevar a cabo actos extremistas… como el matar al Primer Ministro», afirmó Katzav a la radio del ejército de Israel.
Agregó que el ambiente era similar al del período anterior al asesinato del ex Primer Ministro Yitzhak Rabin, ocurrido en 1995 a manos de un judío ultranacionalista.
El Presidente dijo que era probable que los extremistas interpretaran mal las declaraciones de algunos rabinos de que el retiro pone en riesgo la existencia de Israel.
«Podrían surgir algunos individuos confundidos que dijeran: ‘Necesito salvar al estado de Israel porque los rabinos dicen que está en peligro'», señaló Katzav.
Cabe recordar que el homicida de Rabin, Yigal Amir, citó afirmaciones de los rabinos como su justificación para haberle disparado al entonces Primer Ministro.
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