Pese a que Israel considera al Hamás como una organización terrorista y rechaza, públicamente, cualquier contacto con ella, lo cierto es que ambas partes están manteniendo contactos como ocurrió en el pasado con la Organización para la Liberación de Palestina (OLP).
«Debemos ser cautos al descartar los contactos con Hamás», afirmó el responsable militar, recordando que «en el pasado, rechazamos a la OLP, y después accedimos a hablar con ellos».
Por ahora, se informó que los contactos se limitan a cuestiones locales como el comercio, la electricidad, o el agua y no se tratan cuestiones diplomáticas.
«Cualquier instancia de un miembro electo de Hamás será evaluada individualmente», afirmó este responsable, precisando que «la actual ‘línea roja’ de Israel consiste en no hablar con ningún miembro de Hamás implicado en terrorismo».
El oficial también consideró que el Hamás redujo considerablemente sus actividades terroristas y se acerca cada vez más a un perfil de movimiento político, destacando que podría conseguir hasta el 30% de los escaños del Parlamento palestino en los próximos comicios de julio.
Según la radio israelí, el responsable de Hamás para Cisjordania, jeque Hassan Yusif, ha confirmado las conversaciones, aseverando que «no hay otra alternativa que estar en contacto con los israelíes si se están tratando asuntos civiles por el bienestar de los habitantes».
