En el Vaticano, el Papa Juan Pablo II recibió en audiencia privada a una representación del más alto nivel del Congreso Judío Mundial, enfatizando la necesidad de que sea consolidada la paz en el mundo y se afiancen las relaciones interreligiosas.
El presidente del CJM, Edgar Bronfman, le pidió al Papa que presione y aliente a ambos lados: Israel y la Autoridad Palestina, para que acepten los parámetros del plan denominado “Mapa de Ruta” como un paso inicial para el logro de la paz en la región, y que le pida a la AP un esfuerzo especial para reprimir la violencia atizada por facciones extremistas.
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