Ahmadineyad afirma que el Holocausto es un mito, y expresó su oposición a la existencia de Israel. Ahmadineyad manifestó que le gustaría visitar Alemania si su equipo avanza a la segunda ronda del Campeonato mundial de Fútbol.
Unas 1.000 personas, según la policía, se congregaron en una plaza en el centro de Nuremberg ondeando banderas israelíes y protestaron junto a disidentes iraníes mostrando una cara política del Mundial.
«Tenemos que dejarle muy claro a Ahmadineyad, el Hitler del siglo XXI, que cruzó la raya», dijo Michel Friedman, un ex líder del Concejo Central de Judíos de Alemania.
«Es nuestro deber, no sólo de los judíos sino de todos los alemanes, decirle a Ahmadineyad que no es bienvenido en Alemania».
El gobierno alemán se negó a prohibir la entrada del Presidente iraní al torneo. «No voy a decir ni una palabra en contra del equipo iraní o el pueblo iraní», señaló el ministro del interior del estado de Baviera, Guenther Beckstein. Sin embargo, «un criminal como Ahmadineyad no es bienvenido. Alguien que niega el Holocausto, que dice que Israel no tiene derecho a existir… se aparta de cualquier civilización o cultura», agregó.
Unos 15 simpatizantes del partido de ultraderecha alemán, portando banderas iraníes y con algunas pancartas de Ahmadineyad, también se manifestaron a las afueras del casco histórico de Nuremberg.
